El dolor en los ojos de Steven
Cuando Steven salió de la habitación, el dolor grabado en su rostro reflejaba la angustia que yo llevaba arrastrando desde que descubrí su traición. A pesar de todo, una parte de mí seguía queriéndole, y ver su sufrimiento despertó en mí una dolorosa simpatía. Sin embargo, por el bien de Tommy y de los frágiles restos de nuestro matrimonio, sabía que tenía que mantenerme fuerte y hacer que Steven comprendiera de verdad la profundidad del daño que le había causado.

El dolor en los ojos de Steven
El oportuno regreso de mi hermana
La soledad se apoderó de mí cuando Steven se marchó, pero entonces, como un ángel de la guarda, llegó mi hermana, que se apresuró a venir a mi lado en cuanto se enteró de que estaba de parto. Su presencia fue un consuelo tranquilizador, un salvavidas muy necesario en aquel momento caótico. Sabía que sería mi roca durante la tormenta, y no podría haber pedido un apoyo más desesperadamente necesario.

El oportuno regreso de mi hermana