Aún Falta Un Oso
Con la euforia del momento al subir al primer oso, nadie se dio cuenta de que el segundo oso ya no estaba. Todos se desesperaron y empezaron a mirar a todas partes a ver si lo veían pero no estaba. El pobre osito ya no había aguantado más y los pescadores se habían demorado mucho al sacar a su hermano…ya no había nada que pudieran hacer por él, al menos habían salvado una vida.

Aún Falta Un Oso
El Milagro
De pronto, uno de los pescadores vio asomar levemente la cabeza del segundo osito y gritó: “¡Ahí está!”. Sin perder ni un segundo fueron allí y trataron de pescarlo rápidamente pues se estaba hundiendo ya, no tenía fuerza en las patas porque se le estaban congelando, como el oso no había ya movimientos, de pronto un pescador no se lo pensó dos veces y se tiró al agua. Era una completa irresponsabilidad pero le salió de dentro.

El Milagro